lunes, 21 de mayo de 2012

GANADORES DEL PREMIO ESPECIAL DEL JURADO


El Jurado del XXI Festival de Teatro de la UPM, en el que nuestra obra se ha representado y ha estado en concurso, nos ha concedido el Premio Especial del Jurado, en su entrega de premios el pasado miércoles 16 de mayo.

PREMIO ESPECIAL DEL JURADO
por la creación de atmósferas utilizando diferentes elementos técnicos






Cuando el jurado se subió al escenario y pronunció nuestro nombre entramos en éxtasis. Es un hito, es lo máximo. De acuerdo, no es el Premio a Mejor Obra (ni a Mejor Dirección, ni Actor/Actriz, Secundario ni Escenografía). Para nosotros, es sinceramente mucho más que todo eso. Haciendo un símil fácil de entender: es como ganar la (UEFA) Europa League. Si eres el Atlético, tiene mucho sentido, todo el del mundo, si eres el Real; no. Nosotros no somos el Real, no hemos contado con ese presupuesto (otros sí y ojalá pudiéramos nosotros ¡bien por ellos!), tampoco tenemos todo el apoyo logístico ni técnico que hubiéramos podido necesitar, ni todo el tiempo del mundo. Pero todo esto lo sabemos, sabemos las cartas con las que jugamos este maravilloso juego porque sabemos que somos un Grupo de Teatro (Dédalo) de una escuela de ingeniería y que nos queda mucho por ganarnos a nuestro público. Por esto es como levantar nuestra Champions particular.




"Para la Crónica del Fin del Mundo" dijo un miembro del jurado, y estallamos en júbilo, "¡vamoooooos!" Y me quedé de nuevo sin voz, como al final del estreno y del último pase. Subimos todos corriendo al escenario del Salón de Actos del rectorado de la Politénica de Madrid y nos entregaron la placa con el nombre de la obra y del grupo inscritos sobre el metal, ya eso no se olvida, el teatro es efímero pero esa placa la guardaremos para siempre. Ya nadie podrá decir que Dédalo sólo ganó un premio cuando lo fundaron hace siete años (el gran Joan Bruno, maestro de muchos se hizo con el galardón de mejor actor secundario en "La Importancia de llamarse Ernesto" la primera obra que montó el Grupo). Dédalo ha vuelto a ganar, y puede ganar como lo hace Histrión, Caín, No es Culpa Nuestra o Teatro en Canal. 

Ya habíamos ganado varios premios antes de que nos dieran este, individuales -el crecimiento interior de cada uno con el teatro-, colectivos -los lazos de amistad-, el del público, por los maravillosos aplausos que nos proporcionaron abarrotando el Salón de Actos (sobretodo el primer y último día, especialmente el último, el más importante, el del Jurado). Pero este premio -aún sin hacernos falta- nos ha hecho muy, muy muy felices.

Sólo nos falta decir ¡Gracias! ¡Gracias a todos aquellos que esperaban escucharlo! ¡Gracias a -entre- nosotros! ¡Gracias madres y padres, amigos y amados! ¡Gracias Mundo que no te has acabado!

domingo, 20 de mayo de 2012

CRONICA DEL TERCER DIA


El pasado 4 de mayo hicimos el último pase de "Crónica del fin del mundo" en la ETSI Aeronáuticos. Desde el momento en que empezamos a montar el escenario, había entre nosotros una pulsión de que esa tarde iba a ser importante, recordada. Después de un segundo día en que los nerivos se relajaron, gracias al esperar una semana, el nerviosismo, esa gasolina adicional para el actor, nos envolvió de nuevo. Lo transformarlo en ilusión y en el gran deseo de que todo saliera bien. Salió.

Montar el atrezzo, maquillarnos, conseguimos hacerlo con sorprendente puntualidad. Y es que cada cosa, por pequeña que sea, es un producto genuinamente nuestro. Gracias a las ideas que hemos compartido, la historia, el escenario y los personajes de "Crónica del fin del mundo" han adquirido forma y sentido, más allá del texto. 

Nos hemos conocido y reconocudo haciendo la obra de teatro: nos hemos transfigurado. Algunos de nosotros era la primera vez que actuábamos y que nos embarcábamos en el mundo del teatro: los comienzos no fueron fáciles. El texto de la obra tampoco invita a la risa y a la camaradería a priori; pero cada uno ha encontró el motor de su personaje y la manera en la que éste se relaciona con los demás. Y aprendimos a relacionarnos con los demás y a extender y crear de esta forma una amistad de alguna manera, inquebrantable. Hemos hecho grupo.


No somos nosotros los que tenemos que decidir si esto ha sido un éxito o no. Para nosotros ha sido un proyecto que queríamos que tuviera un éxito peronal, y lo ha tenido. El jurado es el que decidirá si alguna voz merece decir que ver esta obra, ha merecido la pena. De esto tratará la siguiente publicación.

jueves, 10 de mayo de 2012

LA ESCENA AMUEBLADA

"Crónica del fin del mundo" es una obra que teóricamente se desarrolla en una única habitación, sin embargo, hay otros dos espacios en juego adyacentes al cuerpo principal: el dormitorio de Ulises y la supuesta "salida" del hotel, que bien puede ser un pasillo. Cada uno de éstos tiene una simbología especial que va más allá de su condición de espacio arquitectónico figurado.

Desde el principio, tuvimos como objetivo introducir el mínimo número de elementos posibles en la escena principal. Básicamente ésta está formada por dos ambientes, el de convivencia -enmarcado por las butacas y sillas- y el de expectación -con una mesa y una silla-. Debido a los sucesos que tienen lugar en la obra, cada ambiente tiene una función y simbolismo determinado.

La zona de convivencia es un lugar para entablar amistades y conversar. Los personajes se sitúan en torno a la mesa, beben y hablan de las cosas que les preocupan y de las extrañas viviencias del día.

DONALD No se preocupen caballeros, ahora enviarán a alguien para solucionarlo. Siéntense, aprovechen esta maravillosa oportunidad que nos ha obrado algún tipo de providencia divina y hagamos que un buen whiskey nos ayude a conocernos.

(Se calma un poco el ambiente y se sientan los tres alrededor de la mesa pequeña, Ulises se va ensimismando en sus pensamientos. Donald se pone a servir unas copas)

El otro lado del escenario es bien distinto. La mesa de despacho y su silla están marcadas desde el principio por la presencia del Hombre Gris desayunando cereales. Es como si este lugar fuera un mirador desde el que contemplar lo que sucede desde fuera, del mismo modo que el Hombre Gris mira y juzga a Ulises desde esa posición.

(En la silla se encuentra sentado el Hombre Gris que se encuentra comiendo cereales)


ULISES (llega desde la puerta del dormitorio, en bata y zapatillas. Mira al HOMBRE GRIS, se detiene) ¿Quién es usted?


El espacio escénico sólo se ve roto en una ocasión, durante el sueño de Ulises y la partida de ajedrez. Se trata del momento más surrealista de la obra, en el que la cotidiana habitación se vuelve un espacio indeterminado. El tiempo se detiene y reina la oscuridad.

A nivel de mobiliario hay otro dos elementos muy importantes, que son el teléfono y la televisión. Éstos son utilizados continuamente por Ulises para demostrar a los demás la existencia de esas "señales" presentes durante toda la obra. Otros personajes intentan utilizar los aparatos, unas veces con éxito y otras no, ayudando a la confusión general.

Finalmente, hay que señalar el proceso de transformación de los espacios adyacentes a la escena, que cada vez van atemorizando más a los personajes, llegando a quedar encerrados completamente. Una vez que Ulises comete el suicidio, todo toma unos tintes extraños. Y el culmen de este sentimiento de que algo va a suceder tiene lugar cuando aparece la silueta del Hombre Gris en el umbral de la puerta, una presencia terrorífica que llena de luz una habitación oscura donde reina el caos.

lunes, 7 de mayo de 2012

EL ESPECTÁCULO DE LA VIDA HECHO MÚSICA

Para cualquier acción hay un elemento de magnificencia, que es la música. Hasta el mero hecho de caminar por la calle con auriculares convierte un paseo en algo épico. La música engrandece, complementa y acompaña los momentos, añadiéndoles nuevos matices de significado. En "Crónica del fin del mundo", la elección de la banda sonora y los momentos en los que ésta había de sonar, no fueron tarea fácil. Una canción puede condicionar un momento hasta límites insospechados, ¿o no nos sucede que la música en sí nos recuerda a cosas?

Hay en total cinco temas musicales dentro de esta obra de teatro, con un carácter muy diferenciado entre sí. Dos de ellos, los que suenan justo al inicio, durante el desayuno del Hombre Gris, pertenecen a la banda sonora de la conocida serie Twin Peaks (1990). Estas canciones fueron compuestas por Angelo Badalamenti, el "compositor fetiche", por así decirlo, del director David Lynch. Su carácter inquietante, pero sensual a la vez, encaja perfectamente con la extrañeza que causa en el espectador y en el propio protagonista el desayuno del Hombre Gris. Hay algo en cómo suena esta música que nos traslada hacia el mundo de lo sobrenatural, de lo inexplicable.

El tema que suena durante más tiempo en la obra es el preludio de la ópera "Tristán e Isolda" de Richad Wagner (1857-1859). Curiosamente, el propio Wagner no considera esta pieza una ópera como tal, sino un drama musical. La música progresa lentamente y está dotada de gran cromatismo, como si el color con el que la orquesta pinta el sonido fuera cambiando de tonalidad sin un solo silencio. El preludio acompaña la escena del sueño de Ulises, en la que se enfrenta a una partida de ajedrez con el Hombre Gris. Es un momento en el que el tiempo se detiene y la escena está teñida de una luz tenue. Los actores son piezas que van cayendo durante la partida, del mismo modo que Isolda se transfigura y sufre el Liebestod o muerte por amor.

El siguiente momento musical no vuelve a aparecer hasta el final de la obra. Se trata de "Monument", un tema de 2012 un grupo de rock progresivo noruego llamado Gazpacho. Pertenece al álbum "March of the ghosts", un disco conceptual que empieza igual que termina. La popularidad de esta banda no está ni mucho menos compensada con la calidad musical de sus discos, especialmente éste último. Gazpacho se mueve entre la grandilocuencia del rock sinfónico y el desarrollo dramático del rock progresivo. Se trata de una música que es capaz de generar atmósfera, de ocupar el espacio en que se reproduce. "Monument" suena en el desenlace caótico de "Crónica del fin del mundo".  Ante la amenaza de la veracidad del último día en la Tierra, cunde el pánico y se desata la locura entre los personajes. Jane es la gota que colma el vaso, pues trata de fotografiar y tomar datos de esos instantes de muerte, llevando la imparcialidad de su profesión hasta el límite. Como Donald predijo, "el final siempre llega con violencia". Con los últimos acordes dramáticos de esta canción, todos pelean entre ellos, se golpean y caen. Todo está rodeado de oscuridad.

El tema final es totalmente imprevisto. Se llama "Summer is Icumen in", también traducida como "Summer is a-Coming in", una melodía medieval inglesa que probablemente date del S. XIII. El que fuera ésta y no otra la música de cierre es una larga historia. Escuchamos esta canción tarareada por uno de los personajes de la película de Woody Allen "Comedia sexual de una noche de verano". A su vez, "Summer is Icumen in" es una de las canciones de "The wicker man", un filme del año 1973 dirigido por Robin Hardy. Esta melodía es algo así como una danza de la muerte. Como se ha mencionado en otra de las entradas del blog, según el pensamiento medieval, la muerte bailaba con todos -sin distinción de clases- hasta llevarlos a su morada. Esta imagen es la que trasladamos al momento en el que se abre la puerta y surge la silueta oscura del Hombre Gris para llevarse consigo los cuerpos tendidos en el suelo del resto de personajes. Todos se levantan lentamente y van tras esa sombra hacia un destino desconocido.

jueves, 3 de mayo de 2012

EL FIN DEL FIN

¿Qué harías si fuera el último día en la Tierra?


Esta tarde gris de Mayo nos invita. La lluvia, el gris, el trueno e incluso el atrevido granizo nos invitan. Nos invitan a preguntarnos esa cuestión. Es una cuestión que tiene algo, algo viscoso, algo de un color indefinido, polimórfico. Probablemente no encontremos respuesta a la pregunta. 

La pregunta dió pie a lo que hoy termina: nuestra obra de Teatro. Ha pasado ya más de un año desde su concepción, otros tantos tres desde el germen de la idea original. La pregunta.

Mañana día 4 de Mayo en el Salón de Actos de la E.T.S.I.Aeronáuticos a las 19.30h probablemente se represente por última vez -en la història, ni que eso tuviera importancia alguna- La "Crónica del Fin del Mundo" y muy probablemente le podamos dar respuesta a la pregunta. La "Crónica" es un drama en tres actos que entre tres y diez personas hemos creado, de un gérmen a una obra a concurso. Mañana, para el concurso, tendremos al jurado presente y eso significa, con total certeza, que os necesitamos. Necesitamos que vengáis y que disfrutéis del fin del Fin. 

Cuando las luces se apaguen, todo terminará, y no será ningún crimen. 

OCULARCENTRISMO


Dice Juhani Pallasmaa en su libro "Los ojos de la piel" que la sociedad actual es ocularcentrista, es decir, que ha dado un predominio absoluto al sentido de la vista, desdeñando los demás. El tema de esta referencia bibliográfica (casual) encaja muy bien con un par de aspectos importantes de "Crónica del fin del mundo", así que trataremos de explicarlo.

Hay un hecho fundamental en esta obra de teatro, y es que Ulises cree ciegamente en el Fin del Mundo porque lo ve en la televisión. Dejando a un lado el tema latente de si es realidad o sueño lo que éste vive, lo que sí que es cierto es que este mensaje le entra a través de los ojos. Se trata de un asunto también trascendente en nuestra sociedad actual, víctima de la producción infinita de imágenes en las que cree a pies juntillas.

El que Ulises solo "vea" el final, hace que sea extremadamente difícil que éste les cuente lo sucedido al resto de personajes, lo que la televisión mostraba. La desesperación, entonces, hará que éste no escuche, que no sienta, que no sea capaz de empatizar con los demás. Por tanto, en esta obra, más que nunca, la vista separa a Ulises del mundo, le convierte en un autómata ajeno a lo que sucede y a lo que le dicen. Mientras tanto, Donald, Ferdinand, Iván, Jane, Violeta y Sylvia tratarán de entablar lazos de amistad, de unirse a través del resto de sentidos -el tacto del amor, la escucha de una conversación interesante, el calor de las lágrimas, el sabor de una buena cena-.

Tampoco la referencia a Brueghel en esta obra de teatro es baladí. Brueghel es un pintor que invita al ojo participativo a viajar por las escenas de acontecimientos múltiples que muestran sus cuadros. En estas imágenes no hay un mensaje único, pues existe la posibilidad de que cada individuo elija qué quiere observar, qué historia quiere inventar en su cabeza. 
En "Crónica del fin del mundo" los personajes actúan como Santo Tomás frente a Jesucristo resucitado: <<Si no lo veo, no lo creo>>. 
"Si no veo en sus manos la señal de los clavos y meto mi dedo en el lugar de los clavos, y meto mi mano en su costado, no creeré."  Juan 20:24-29

Los apóstoles tenían que creer en la resurrección sin comprobarlo con sus propios ojos; lo cual es el sentido primordial de la fe. En "Crónica del fin del mundo", por tanto, es como si ningún personaje tuviera fe en Ulises.

martes, 1 de mayo de 2012

TERCER ACTO EN IMÁGENES

El desenlace de Crónica del fin del mundo...por Santiago Galán Álvarez; o si es necesario retrasar el fin.

 Ulises se despierta de un extraño sueño


 Ulises intenta recordar lo que ha soñado


Donald intenta persuadir a Jane de que asista a la cena


 Donald no soporta la soledad


 Ferdinand, en realidad, persigue a Violeta, "esa hermosa criatura"


 Sylvia protesta por la cantidad de trabajo que tiene que
afrontar el hotel ese día


 Donald intenta simpatizar con la atareada Sylvia


 Una misteriosa medicina


 Ferdinand intenta convencer a Ulises
de tomar otra copa junto


 Ulises se siente solo en el mundo,
al borde del abismo


Carina está ansiosa por probar la cena



 Ulises permanece al margen


 Jane e Iván asisten finalmente a la cena

 Todos brindan por los inesperados y casuales sucesos

Y, después del brindis... lo verán en la próxima entrega. El final siempre viene con violencia.